Gerardo Dicrola: performance en Córdoba



Gerardo Dicrola. Fotos: Ars Operandi

José Álvarez / Ars Operandi 

El pasado día 3 de diciembre, con motivo de la inauguración de la exposición Una superación del arte: Mayo del 68 o el espectáculo de la sociedad, el artista italo-francés Gerardo Dicrola realizó una performance en la Sala Puertanueva consistente en proceder a la oxidación de una plancha de acero tratada químicamente mediante el continuo gotear de unos bloques de hielo suspendidos del techo. La acción se encuadra dentro de la significación de su processus art, donde todo es metamorfosis, evolución, alteración y cambio, y que aúna el uso del hielo como metáfora de lo efímero y la materialidad del acero y su proceso de oxidación.

Gerardo Dicrola nació en abril de 1941 en Salerno, Italia. Tras realizar sus estudios artísticos, a finales de los años cincuenta toma contacto con Giorgio de Chirico, de quien recibirá una temprana influencia y de quien se declara admirador. Después de una serie de exposiciones en su país natal y de varios viajes por Europa, decide en 1970 instalarse en París.

Mon souffle dans una bulle de savon, 1971

Sus primeros happenings en la capital francesa le hacen merecedor pronto de la atención de la comunidad artística. En 1973 forma el grupo V.I.D., con el que trabaja en el ámbito del process art, del que es considerado inciador en Europa y uno de sus principales teóricos, no obstante Dicrola reivindica el término processus art. La diferencia estriba en que si bien en el process art (resultado de tendencias como el expresionismo abstracto y más certeramente del action painting) se atiende al proceso de fabricación de la obra (que incluye la obsesión greenbergiana por la flatness), el processus art no atiende sólo a la aleatoriedad de la creación del objeto, sino a su aspecto metafísico, al constante devenir de lo creado.

Es un momento radical en el que Dicrola rechaza el mercantilismo asociado al arte y se decanta por el arte efímero. En 1971 realiza la performance Mon souffle dans una bulle de savon. Las pompas de jabón son la materialización de su idea del arte en ese momento, una metáfora que amplía al comenzar a trabajar con hielo. Con hielo fabrica la palabra ART y la deja descongelar (La mot ART en glace, 1975), o sobre hielo escribe textos que se disuelven a la vez que éste se convierte en agua (Nietszche, 1975). Tras sus realizaciones efímeras, comienza a experimentar con la oxidación, donde muestra la inestabilidad y la descomposición de la materia, y donde sigue incluyendo textos que se van transformando de la misma forma que lo hace el metal.


La mot ART en glace, 1975

A principios de los 80, cuando las tendencias más experimentales del arte parecían haberse agotado, Dicrola realiza su retorno a la pintura, donde trata de poner en marcha un proceso análogo a sus anteriores obras, esta vez por medio de una abrumadora materialidad que ofrece una impresión de inestabilidad, si bien el recurso de lo figurativo y la obra acabada como objeto le distancia de sus manifestaciones de los primeros 70.

En una conversación previa al inicio de la performance, Dicrola nos estuvo señalando la importancia que, a su parecer, adquiere el preciso conocimiento de la técnica para el correcto desarrollo del proceso de creación del objeto artístico. Tras convenir en que sólo un correcto manejo de los materiales permite al artista sacar el máximo partido a su propuesta, la charla derivó hacia los procedimientos pedagógicos (Dicrola ejerce de profesor), y sobre la necesidad de la divulgación del arte contemporáneo en las jóvenes generaciones mediante el necesario contacto con éste, visitando galerías, museos o centros de arte contemporáneo.


Un instante de la charla con Dicrola


La performance


Gerardo Dicrola realizó expresamente para la inauguración de la exposición Una superación del arte: Mayo del 68 o el espectáculo de la sociedad, una obra cuyo proceso dio como resultado la oxidación de una plancha de acero tratada químicamente. Para ello dispuso una placa calefactora bajo el metal, que alcanzó una elevada temperatura. Previamente se habían dispuesto unos bloques de hielo colgados del techo, los cuales, al deshacerse, arrojaban gotas de agua sobre la plancha caliente, produciendo una reacción química en la superficie, transformada continuamente durante los dos días que tardaron los bloques de hielo en derretirse. La pieza resultante pasará a formar parte de los fondos de la Fundación Provincial de Artes Plásticas Rafael Botí.


Dicrola junto a Michel Hubert, comisario de la exposición, ante la instalación




El proceso


Dicrola y Hubert posan para nuestra cámara junto a la obra Trace (1980), chapa oxidada con el texto ART, de Dicrola
Fotos: Ars Operandi

Una superación del arte: Mayo del 68 o el espectáculo de la sociedad
Sala Puertanueva
Ronda de Andújar (Facultad de Derecho), Córdoba
Hasta el 16 de enero de 2009
Comisario: Michel Hubert

Bookmark and Share
.

Comentarios