Fernando M. Romero, primera individual en Siboney


Folded_027 de Fernando M. Romero. Foto: Cortesía del artista
Redacción / Ars Operandi

Cosecha abundante la del año en curso para el artista cordobés Fernando M. Romero. Comenzaba 2014 con su presentación en la galería valenciana Paz y Comedias con la exposición Humor vítreo. En abril en Córdoba pudimos ver una parte de su producción última en Dust is going to settle. El polvo se posará, la muestra a dos con Natalie Häusler realizada en el espacio independiente CoMbO. En Sevilla acaba de descolgar Feel in the blank, una selección de obras que ha desplegado en la galería AJG con la que también comienza andadura profesional. Y en plena temporada artística alta en Santander y tras mantener una colaboración inicial con Siboney que le ha llevado a participar en colectivas y ferias como Just Mad y Arte Santander, Romero presenta en estos días su primera exposición individual en la galería santanderina.

Un_Folded_001 de Fernando M. Romero. Foto: Cortesía del artista
El mapa no es el territorio forma parte del trabajo que ha ido desarrollando en el último año a partir del proyecto Plegados con el que obtuvo la Beca Pilar Montalbán. En él la pintura, que en anteriores series ya había desbordado la superficie del cuadro, entra en negociación con la fotografía en un proceso de interacción simbiótica. Para Fernando M. Romero ambas disciplinas se contagian mutuamente. "Los patrones y elementos sencillos con los que trabajo", explica el artista, "son pintados, construidos, doblados, capturados, impresos, escaneados y vueltos a pintar en el estudio. Y así repetidas veces, con lo que las imágenes resultantes terminan acumulando diversos fallos de registro que desencadenan una interferencia en lo que estamos viendo. Cuando llegan a ese punto en el que la representación queda suspendida o cortocircuitada es cuando paso a la siguiente obra. En este caso todo ese uso auxiliar de la fotografía en el estudio ha cobrado entidad propia y algunas ideas se han desarrollado mediante pequeñas intervenciones efímeras que la cámara ha ido capturando como obra final".

Folded_038 de Fernando M. Romero. Foto: Cortesía del artista
Una obra que aunque materializa tanto en pintura como en instalación y fotografía mantiene en su raíz un acusado discurso pictórico. "Es la pintura", afirma, "la que moldea mi forma de mirar, de pensar y de construir significado. Y para mí sigue siendo así aunque el soporte final no sea necesariamente pintura sobre lienzo. El uso de la fotografía, de instalaciones o de intervenciones es una forma de mostrar procesos que suceden en el estudio y que no siempre conducen a una pintura. En mi proceso diario en el estudio no hay barreras entre fotografía, instalación, pintura o intervención, pues todo forma parte de lo mismo y se influye mutuamente. Saltar de una disciplina a otra me ofrece formas de abordar el mismo problema desde enfoques distintos y me permite acotarlo con mayor precisión. La fotografía o las intervenciones me brindan un ritmo y una independencia frente a la escala que me permiten desarrollar ideas que no podría hacer en pintura".

Folded_005 de Fernando M. Romero. Foto: Cortesía del artista
En El mapa no es el territorio Fernando M. Romero analiza nuestra mirada del mundo y pone sobre el tapete cuestiones que tienen que ver con la realidad, su representación y su percepción. "Mi trabajo siempre ha incidido en cómo nuestras concepciones previas afectan y modifican nuestra percepción de la realidad". Unas preocupaciones que, para Sema D'Acosta, son de orden conceptual más que procedimentales. "Lo que encontramos en su obra es un permanente cuestionamiento del medio que rebate no sólo sus fronteras, sino también la manera en que se construye una representación artística o es percibida por el espectador. Lejos de la ortodoxia canónica del género, sus planteamientos van acumulando estratos de complejidad hasta confundir el carácter de sus piezas, que en muchos casos no son ni una cosa ni la otra, sino más bien una mezcla amplificada de valores diferentes que superan las preocupaciones habituales de la pintura para adentrarse por otros derroteros más profundos que nos hacen pensar sobre lo que vemos y cómo se construye la realidad al modo en el que lo describe John Berger, evitando los juicios preestablecidos y asumiendo el peso de la contemporaneidad".

El mapa no es el territorio
Fernando M. Romero 
Galería Siboney, Santander 
Hasta el 7 de julio


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